Los espacios de la mujer
En
el PKK las estructuras organizativas tienen espacios particulares para
las mujeres. De las 15 academias de formación, 4 son exclusivas para
mujeres, donde discuten y analizan sus problemáticas. También existen
campamentos y unidades guerrilleras conformadas por mujeres.
En
1993 se formó el primer ejército guerrillero de mujeres, que tuvo el
apoyo total de Ocalan. “Creamos esta formación porque queríamos salir
completamente de la dirección del hombre –explica Rengin Botan-. La
mujer tiene argumentos y razones particulares que el hombre no puede dar
respuestas. El nacimiento de esta unidad permitía una vida social más
equilibrada y ejemplar, y para nosotras fue una revolución”.
“Somos
una organización donde las mujeres tienen sus propias estructuras
–señala Harun-. Esto permite a la mujer existir y participar. Cuando
nosotros creamos el partido quizá no había esas definiciones
ideológicas, pero la manera de luchar nos permitió llegar a estas
resoluciones. Muchas mujeres que son líderes han marcado al partido. En
la guerrilla hay formación política y militar, y grupos guerrilleros
para hombres y mujeres. Cuando los occidentales escuchan esto piensan
que es algo arcaico, pero no es en el sentido tradicional, sino porque
las mujeres y los hombres necesitan hablar de sus particularidades y
tener sus espacios. Hombres y mujeres estamos juntos en cada espacio de
lucha. Tenemos un partido de mujeres, columnas de mujeres, y otras
formas de organizaciones. Las mujeres se organizan a nivel regional,
nacional y confederal. En las últimas elecciones de la Unión de
Comunidades de Kurdistán (UCK), las mujeres obtuvieron 63 por ciento de
los votos”.
“En
general estamos juntos y cuando una región necesita una unidad
decidimos cuántos hombres y mujeres van. También hay brigadas de mujeres
que están combatiendo en Turquía. Se decide según las necesidades y la
región. En cada comisión estamos juntos, pero en las unidades
guerrilleras podemos estar separados, hay campamentos de mujeres y
hombres, pero cuando vamos al frente nos mezclamos”, finaliza Rengin
Botan.